De Ayotzinapa, del Festival y de la histeria como método de
análisis y guía para la acción. Subcomandante Insurgente Moisés
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EJÉRCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL.
MÉXICO.
MÉXICO.
Diciembre del 2014.
A l@s compas de la Sexta nacional e internacional:
Al Congreso Nacional Indígena:
A los familiares y compañeros de los asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa:
Al Congreso Nacional Indígena:
A los familiares y compañeros de los asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa:
Hermanas y hermanos:
Compañeros y compañeras:
Compañeros y compañeras:
Hay muchas cosas que queremos decirles. No las diremos todas
porque sabemos que ahora hay asuntos más urgentes e importantes para todas,
todos y todoas. Pero como quiera son muchas cosas y es larga nuestra
palabra. Así que les pedimos paciencia y una lectura atenta
Nosotros, nosotras, zapatistas, acá estamos. Y desde acá
miramos, escuchamos, leemos que la palabra de familiares y compañeros de los
asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa se empieza a quedar atrás y que ahora,
para una parte de los de allá, es más importante…
la palabra de otros y otras en los templetes;
la discusión sobre si las marchas y manifestaciones
pertenecen a los bien portados o a los maleducados;
la discusión sobre cuál tema es más mencionado a mayor
velocidad en las redes sociales;
la discusión sobre la táctica y la estrategia a seguir para
“trascender” el movimiento.
Y pensamos que siguen faltando los 43 de Ayotzinapa, los 49
de la guardería ABC, las decenas de miles de asesinad@s y desaparecid@s
nacionales y migrantes, l@s pres@s y desaparecid@s polític@s.
Y pensamos que sigue secuestrada la verdad, sigue
desaparecida la justicia.
Y pensamos también que hay que respetar la legitimidad y
autonomía de su movimiento.
Sus voces, nosotras, nosotros zapatistas las escuchamos de
frente. Miles de bases de apoyo zapatistas lo hicieron y sus voces llegaron
después a decenas de miles de indígenas. Su voz entonces habló en tzeltal, en
chol, en tojolabal, en tzotzil, en zoque, en castilla a nuestro corazón
colectivo.
Esas voces tienen juicio, saben de lo que hablan, y es su
corazón como el nuestro cuando se hace dolor y rabia. Saben su camino y lo
andan.
Se saben ell@s. Nos saben a nosotr@s en rabias y dolores.
Nada tenemos que enseñarles nosotros, nosotras. Todo tenemos que aprenderles.
Por eso ahora, cuando su voz pretende ser tapada,
silenciada, olvidada o torcida, les mandamos nuestra palabra para abrazarlos.
Por eso decimos que lo primero, más importante y urgente es
escuchar a los familiares y compañeros de los desaparecidos y asesinados de
Ayotzinapa. Son esas voces las que han tocado el corazón de millones de
personas en México y en el mundo.
Son esas voces las que han señalado el dolor y la rabia, las
que han denunciado el crimen y han señalado al criminal.
La importancia de esas voces la reconocen, tanto el
gobierno, que trata de deslegitimarlas; como los buitres, que tratan de
torcerlas.
Busquemos que esas voces retomen su lugar y rumbo.
Esas voces resistieron a la calumnia, resistieron al
chantaje, resistieron al soborno. Esas voces no se vendieron, no se rindieron,
no claudicaron.
Esas voces son solidarias. Supimos, por ejemplo, que cuando
se acumulaban jóvenes en las cárceles, y los “bien portados” les aconsejaban a
esas voces que no se detuvieran en l@s pres@s, que su liberación no era lo
importante porque de por sí el gobierno estaba “infiltrando” las
movilizaciones, las voces dignas y firmes de los familiares y compañeros de los
43 dijeron, palabras más o menos, que para ellos lo de la libertad de los
detenidos era parte de la lucha por la presentación de los desaparecidos. O sea
que, como quien dice,
esas voces no se dejaron chantajear ni compraron la
baratija barata de los “infiltrados”.
Cierto, esas voces han tenido la fortuna de encontrar una
población receptiva en su par básico: el hartazgo y la empatía. El hartazgo
frente a las formas “clásicas” del Poder, y la empatía entre quienes padecen
sus abusos y costumbres.
Pero eso ya estaba en calendarios y geografías diversos. Lo
que pone a Ayotzinapa en el mapa mundial es la dignidad de los familiares y
compañeros de los jóvenes asesinados y desaparecidos. Su tenaz e intransigente
insistencia en la búsqueda de justicia y verdad.
Y en su voz se reconocieron muchas y muchos en todo el
planeta. En sus palabras hablaron otros dolores y otras rabias.
Y sus palabras nos vinieron a recordar muchas cosas. Por
ejemplo:
Que la policía no investiga robos; la policía secuestra,
tortura, desaparece y asesina personas con o sin filiación política.
Que las instituciones actuales no son el lugar para encausar
la indignación, las instituciones son las que provocan indignación.
Que el sistema no tiene soluciones para el problema porque
él es el problema.
Que, desde hace tiempo y en muchas partes:
los gobiernos no gobiernan, simulan;
los representantes no representan; suplantan;
los jueces no imparten justicia, la venden;
los políticos no hacen política, hacen negocios;
las fuerzas públicas del orden no son públicas y no imponen
más orden que el del terror al servicio del que tenga más paga;
la legalidad es el disfraz de la ilegitimidad;
los analistas no analizan, trasplantan sus fobias y sus
filias a la realidad;
los críticos no critican, asumen y difunden dogmas;
los informadores no informan, producen y distribuyen
consignas;
los pensadores no piensan, comulgan con las ruedas de molino
de moda;
el crimen no se castiga, se premia;
la ignorancia no se combate, se ensalza;
la pobreza es el pago para quienes producen las riquezas.
Porque resulta, amigos y enemigos, que el capitalismo se
nutre de la guerra y de la destrucción.
Porque se acabó la época donde los capitales necesitaban de
paz y estabilidad social.
Porque en la nueva jerarquía dentro del capital, el
especulativo reina y manda, y es su mundo el de la corrupción, la impunidad y
el crimen.
Porque resulta que la pesadilla de Ayotzinapa no es local,
ni estatal, ni nacional. Es mundial.
Porque resulta que no es sólo contra jóvenes, ni sólo contra
varones. Es una guerra con muchas guerras: la guerra contra lo otro, la guerra
contra los pueblos originarios, la guerra contra la juventud, la guerra contra
quienes, con su trabajo, hacen andar al mundo, la guerra contra las mujeres.
Porque resulta que el feminicidio es tan añejo,
cotidiano y ubicuo en todas las ideologías, que es ya “muerte natural” en los
expedientes.
Porque resulta que es una guerra que cada tanto toma nombre
en un calendario y una geografía cualesquiera: Erika Kassandra Bravo Caro:
mujer, joven, trabajadora, mexicana, 19 años, torturada, asesinada y desollada
en el “pacificado” (según las autoridades civiles, militares y mediáticas)
estado mexicano de Michoacán. “Un crimen pasional”, dirán, como quien dice
“víctimas colaterales”, como quien dice “un problema local en un municipio del
provinciano estado mexicano de… (ponga el nombre de cualquier entidad
federativa)”, como quien dice “es un hecho aislado, hay que superarlo”.
Porque resulta que Ayotzinapa y Erika no son la excepción,
sino la reafirmación de la regla en la guerra capitalista: destruir al enemigo.
Porque resulta que en esa guerra el enemigo somos todas,
todos, todo.
Porque resulta que es la guerra contra todo, en todas sus
formas y en todas partes.
Porque resulta que de eso se trata, de eso se ha tratado siempre:
de una guerra, ahora contra la humanidad.
En esa guerra, l@s de abajo encontraron en los familiares y
compañeros de los ausentes de Ayotzinapa un eco amplificado de su historia.
Ya no sólo en su dolor y rabia, sobre todo en su terco
empeño de encontrar la justicia.
Y con su voz se terminaron las mentiras del conformismo, del
“aguantamos todo”, del “no pasa nada”, de “el cambio está en un@ mism@”.
Pero, en medio del dolor y la rabia, arriba de nuevo
revolotean los buitres sobre la extendida mancha de muertes y desapariciones
nombradas.
Porque donde un@s cuentan ausencias injustas, otr@s cuentan
votos, vidrios, cargos, membretes, encabezados, marchas, firmas, likes, follows.
Pero no hay que dejar que la cuenta que cuenta e importa se
quede atrás.
Nosotras, nosotros, zapatistas del EZLN, pensamos que es tan
importante lograr que retomen su lugar las voces de los familiares y compañeros
de los asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa, que hemos decidido:
1.- Ceder nuestro lugar en el Primer Festival Mundial de las
Resistencias y las Rebeldías contra el Capitalismo, a los familiares y
compañeros de los Normalistas de Ayotzinapa asesinados y desaparecidos.
Pensamos que en sus voces y oídos habrá ecos generosos en y para tod@s l@s que,
estando o no estando, participarán en el Festival.
2.- Por eso nos estamos dirigiendo a las compañeras y
compañeros del Congreso Nacional Indígena en las distintas sedes, a la Comisión
Conjunta del CNI-Sexta para el Festival Cultural, y a quienes apoyarían a
nuestra delegación en transporte, alojamiento, alimentación, seguridad y salud,
para pedirles que dediquen y apliquen sus esfuerzos a los familiares y
compañeros de los Normalistas de Ayotzinapa que hoy nos hacen falta a tod@s.
Por eso pedimos que los atiendan, escuchen y les hablen como si fueran
cualquiera de l@s 20 zapatistas, 10 mujeres y 10 hombres, que formarían nuestra
delegación.
3.- Por eso pedimos, respetuosamente, a los familiares y
compañeros de los ausentes de Ayotzinapa que acepten nuestra invitación y
nombren, de entre ell@s, una delegación de 20 personas, 10 mujeres y 10
hombres, y participen como invitados de honor en el Festival Mundial de las
Resistencias y Rebeldías contra el Capitalismo a celebrarse del 21 de diciembre
del 2014 al 3 de enero del 2015. Para nosotros, nosotras las zapatistas fue muy
importante escucharlos directamente. Creemos que será muy bueno que todas las
personas que asistan al festival tengan el mismo honor que nos concedieron. Y
creemos también que a ustedes les aportará mucho el conocer otras resistencias
y rebeldías hermanas en México y el mundo. Podrán ver entonces lo grande y
extendido que es el “no están solos”.
4.- El EZLN participará en el Festival. Nuestro oído atento
y respetuoso estará ahí como uno más entre nuestr@s compas de la Sexta. No en
templetes ni en lugares especiales. Como sombras estaremos, junto a tod@s,
entre tod@s, detrás de tod@s.
5.- Nuestra palabra para la compartición está ya en un
video. Se le ha indicado a “Los Tercios Compas” que lo hagan llegar en su
oportunidad a las distintas sedes del Festival y a los Medios Libres,
Alternativos, Independientes, Autónomos o como se llamen, que son de la Sexta,
para que lo difundan, si así lo consideran pertinente, en sus tiempos y modos.
6.- El 31 de diciembre del 2014 y el día primero del año del
2015 será un honor para nosotros recibir, en el caracol de Oventik, como
invitados especiales a las mujeres y hombres que, con su dolor y rabia, han
levantado en todo el planeta la bandera de la dignidad que abajo y a la
izquierda somos.
7.- Y no sólo, también aprovechamos para invitar a todas,
todos y todoas de la Sexta nacional e internacional, encapuchad@s o
no, a que participen en esta gran compartición, a que hablen de sus historias y
a que escuchen a la otra, al otro, a lo otroa.
-*-
De la histeria como método de análisis y guía para la acción.
Nosotras, nosotros, zapatistas, acá estamos. Desde acá los
miramos, escuchamos, leemos.
En las recientes movilizaciones por la verdad y la justicia
para los normalistas de Ayotzinapa, se ha repetido la disputa por imponer el
carácter de las movilizaciones, ahora llegando a la criminalización de quienes
coinciden con un estereotipo trabajado: jóvenes, con el rostro cubierto,
vestidos de negro, y que son o parecen anarquistas. En suma, son mal portados.
Y como tales deben ser expulsados, señalados, detenidos, amarrados, entregados
a la policía o a la justa ira de los sectores progresistas.
A esto se ha llegado con reacciones coincidentes o cercanas
a la histeria en algunos casos, y a la esquizofrenia en otros, impidiendo una
argumentación razonada y un debate necesario.
Aunque ya habíamos presenciado esto antes (en la huelga de
la UNAM 1999-2000, en 2005-2006, en 2010-2012), el relanzamiento de este método
de análisis y guía para la acción de la izquierda bien portada, permite algunas
reflexiones:
Los familiares y compañeros de los asesinados y
desaparecidos de Ayotzinapa, como los de decenas de miles de desaparecid@s y
asesinad@s, no piden caridad o lástima, demandan verdad y justicia.
¿Quién es quién para decir que esas demandas, que son las de
cualquier ser humano en cualquier parte del mundo, tienen que expresarse de tal
o cual forma? ¿Quién escribe el “manual de buenos y malos modos” para expresar
el dolor, la rabia, la inconformidad?
Pero bueno, se puede y debe debatir cómo abraza más y mejor
la palabra “compañer@”. Si con una voz engolada en lo alto de un templete o si
con un vidrio roto. Si con un “Trending Topic” o si con una patrulla
policial en llamas. Si con un blog o con un grafiti. O tal vez con todas o tal
vez con ninguna de ellas, y cada quién con su cada cual crea, construye,
levanta su modo de apoyar.
Pero ni siquiera quienes tienen la autoridad moral y la
estatura humana para decir “así sí” o “así no”, es decir, los familiares y
compañeros de los que faltan de Ayotzinapa, lo han hecho.
Entonces, ¿quién ha otorgado los cargos de comisarios del
buen comportamiento para el apoyo y la solidaridad? ¿De dónde viene ese alegre
señalar a unos y a otras como “agentes gubernamentales”, “infiltrad@s” y,
¡horror de horrores!, “anarquistas”?
/ Es ridículo que se argumente “ésos no son estudiantes, son
anarquistas“. Cualquier anarquista tiene más bagaje cultural y conocimientos
científicos y técnicos que el promedio de quienes, como policías del
pensamiento, los señalan y piden para ell@s la hoguera. Y ni hablar de quienes
enarbolan y se enorgullecen de la estupidez y la ilegalidad como método
policíaco (“le guste a quien le guste”) en el gobierno de la Ciudad de México.
/
Pero, claro, se puede inventar un monigote a modo (una
especie de anarquista insurreccional región 4) y ridiculizarlo confeccionándole
un cuerpo teórico caricaturizado, para que así pueda ser despachado sin
contratiempos en cualquier ministerio público mediático o judicial (claro, si
es grabada en video su detención, si no, pues, ¿quién lo va a extrañar?).
Después de todo, la información “periodística” viene de fuentes confiables: las
delaciones y la policía política.
No es lo mismo señalar (quien señala acusa, juzga y condena,
y demanda que la policía ejecute la sentencia), que debatir. Porque para señalar
sólo es necesario estar a la moda (lo que es cómodo, fácil y, bueno, sí,
aumentan los “likes” y los “follows“). Para señalar no se necesita una
investigación argumentada, basta “postear” algunas fotos.
Así nacen los grandes romances entre l@s “líderes de
opinión” y las masas de “seguidores”: la fe ciega sintetizada en 140
caracteres.
Del “yo te sigo y tú me sigues” a ” y
vivieron muy felices“, de ahí a “No me amas porque no me das RT ni Fav ni like.
Cambiaré de Sinsajo“.
Para debatir hay que investigar (órales: tras que hay
diferentes anarquismos; órales reiterado: tras que la “acción directa” no es
necesariamente violenta), pensar, argumentar y, ¡arghhh!, lo más peligroso y
difícil: razonar.
Debatir es difícil e incómodo. Y hay consecuencias para
quien debate (digo, además de los pulgares abajo, los dedos medios arriba y los
“ya no te sigo” en cascada).
Ni modos, luego hay gente que no camina por la vida tratando
de agradar, conformar, encajar, atraer.
Detrás de cada ser crítico hay una larga lista de
“seguidores” desertando, mudándose a donde no haya que pensar y el RT no sea un
autogol.
Y cuando el periodismo progre suple las funciones
de ministerio público y acusa, interroga, concluye y condena, ¿señala o debate?
¿O se trata de debatir así? ¿L@s anarquistas en las cárceles
o perseguid@s o exiliad@s, y las buenas conciencias en los editoriales, los
micrófonos y el azul trinar?
Ok, ok, ok. ¿Pero estamos de acuerdo en apoyar a los
familiares y compañeros de los asesinados y desaparecidos de Ayotzinapa, o eso
ya no importa?
¿Tampoco los infantes de la guardería ABC, los desaparecidos
de Coahuila, los migrantes ignorados, los “daños colaterales” de la guerra, la
mujeres violentadas y asesinadas todos los días a todas horas en todos los
lugares en todas las ideologías?
¿Sólo importan el cambio de nombre de quien se sienta en la
silla o el promover el empleo en las empresas de vidrios, cristales y
anaqueles?
A quienes insisten en el camino electoral como única y
excluyente opción, no se les ha acusado de “infiltrados”, “policías”,
“provocadores” o “soldados de la sedena vestidos de civil”. Se les acusa de
ilusos, ingenuos, bobos, tontos, buscachambas, oportunistas, intolerantes,
ambiciosos, buitres, tiranos y déspotas. Bueno, también de fascistas. Pero no
de “infiltrados”, aunque más de un@ cumple a cabalidad con el perfil real de
agente gubernamental y policía político.
Sabemos que unos y otros son grandes estrategas (basta ver
los logros que han obtenido), piensan, proponen e imponen que “hay que
trascender la movilización”. Los unos con marchas bien vestidas y educadas
buscando contener y encauzar; los otros con la acción directa, violenta y
excluyente de la rabia.
Unos y otros con el afán vanguardista, de élite exclusiva,
de dirigir, hegemonizar y homogeneizar la diversidad en modos, tiempos y
lugares.
Del “si rompes un vidrio eres infiltrad@” al “si no lo
rompes… también”
Para unos y otros lo que vale y cuenta es el centro
geográfico y lo que en él converge: el poder político, económico y mediático.
Si no pasa en la ciudad de México, no ocurre, no tiene
validez, no cuenta. Lo “histórico” es su patrimonio exclusivo.
No existen para ellos las movilizaciones en Guerrero,
Oaxaca, Jalisco, Veracruz, Sonora, y demás rincones de México y del mundo.
Pero como en unos y otros reina la pereza para el análisis
crítico, no se dan cuenta de que no es ahí donde está el centro del Poder.
Allá arriba las cosas han cambiado y mucho.
Mientras se siga abandonando el análisis serio y profundo
del nuevo carácter del Poder, siguiendo de narices los calendarios de arriba
(electorales e institucionales) de una a otra fecha, o el apremio de “algo hay
que hacer, lo que sea” manque sea inútil y estéril, se seguirán reiterando los
mismos métodos de lucha, los mismos reflujos, las mismas derrotas.
Hacia un debate serio:
Sobre las acciones directas en las marchas de la ciudad de
México, el 8 y 20 de noviembre y el 1 de diciembre del 2014, acaso convenga
recordar las siguientes palabras de Miguel Amorós:
“En tales eventos la sola presencia de ciudadanistas y
aliados suyos ya basta para sembrar la confusión y convertir las mejores
intenciones radicales en puro activismo, integrado sin dificultad en el
espectáculo y por lo tanto manipulable, como argumento de los gobernantes para
justificar los excesos de la fuerza pública o como coartada de los
ciudadanistas para justificar el fracaso de sus expectativas. El activismo
-violento o sólo ideológico- es el mayor revelador de la obsolescencia de la
revuelta al reflejar la pobreza teórica y la debilidad estratégica de los
enemigos del capital y del Estado. Acuciados los activistas por la necesidad de
hacer “algo”, se apuntan a todos los bombardeos, cayendo por tanto en la trampa
mediática y espectacular, que los tacha de gamberros o de provocadores. El
resultado no es útil más que para los gobiernos, los partidos o los
seudomovimientos, basura que si existen es para impedir la más remota
posibilidad de una lucha autónoma o de un pensamiento revolucionario". Amorós,
Miguel. “El Ocaso de la Revuelta” Octubre del 2001. En “Golpes y Contragolpes”
Pepitas de calabaza ed. & Oxígeno dis. España. 2005.
Lo que sigue: requisitos para manifestarse:
Ellos: credencial del INE o cédula de identidad, comprobante
de domicilio (si no tiene casa propia, copia del contrato de arrendamiento; si
la tiene hipotecada, ¿qué hace usted aquí?), saco y corbata (no, smoking no, no
hay que exagerar todavía, ése es para cuando crucemos triunfantes, sobre los
hombros de la muchedumbre, la sagrada puerta que los inconscientes pretendieron
destruir), manos y cara limpias, sin tatuajes visibles, sin piercings, y sin
peinados estrafalarios (estrafalarios: todo lo que no aparezca en las revistas
de moda), zapatos de vestir (nada de tenis o botas), firmar una
carta-compromiso donde se obligue a respetar todo signo de autoridad y/o de
poder en cualquiera de sus acepciones, así como señalar cualquier actitud o
intención de separarse de estas reglas.
Ellas: lo mismo pero con traje sastre. Oh, lo lamento, sí,
tiene que peinarse.
Elloas: no califican para manifestarse. Por favor proceda al
siguiente closet.
De la vanguardia del proletariado y los bien y mal portados:
Les avisamos, porque creemos que no saben, que el Sindicato
Mexicano de Electricistas (SME) nos negó, al CNI y al EZLN, el préstamo de una
de sus instalaciones para la celebración de los actos culturales, en el DF, del
Primer Festival Mundial de las Resistencias y las Rebeldías contra el
Capitalismo: “Donde los de arriba destruyen, los de abajo reconstruimos”.
Antes de la campaña de “pórtese bien y diga NO a las
capuchas”, el SME había otorgado, generoso, uno de sus locales para la fiesta
cultural. Conforme fue avanzando la campaña de “no temas al Estado, témele a lo
diferente”, fueron apareciendo los pretextos que preparaban el camino: “es que
son vacaciones, no hay quien cuide, no vamos a pasar la navidad así”.
Después fueron más claros y nos dijeron: “que un sector
dentro del SME estaba en contra de lo que se hacía en solidaridad con otras
luchas, que en asamblea se había planteado la necesidad de parar ese asunto de
estar metidos con los de Ayotzinapa, que no era posible estar, por un lado
negociando con el gobierno y, por el otro lado, metidos con un movimiento de
jóvenes encabronados, encapuchados, que estaban haciendo acciones como las de
Palacio; y que habían tenido que parar lo de la llegada de los jóvenes que
querían hacer parada en el deportivo (se refiere al lugar, propiedad del SME,
que iban a prestar), cuando llegaran las caravanas, que luego ustedes (la Sexta
y el CNI) y sus encapuchados (en el papel de los encapuchados: el EZLN)
queriendo hacer su festival, que no se puede, que búsquense otro lugar, que
esperan que los comprendamos”.
Dijeron más cosas, pero se refieren a cuestiones internas
del SME que no nos corresponde repetir ni difundir.
¿Qué tal? Los compas del Congreso Nacional Indígena habían
propuesto que fuera en un local del SME como un reconocimiento y saludo a su
lucha y resistencia, y nosotros apoyamos su propuesta. Y todavía por ahí hay
quien piensa que las purgas serán hasta el improbable momento en que la
vanguardia proletaria tome el Poder.
Y pues nosotras, nosotros los zapatistas comprendemos. Pero
no entendemos. No entendemos cómo fue que un movimiento que ha padecido una
campaña con toda clase de calumnias, mentiras y hostigamientos (aún mayor que
la que ahora padecen jóvenes, anarquistas y no anarquistas, encapuchados y no
encapuchados, estudiantes y estudiosos) como el SME, se rindió a la moda de
criminalizar a lo diferente. No entendemos cómo es que suscriben la moda en
turno y deciden entrar al “aro” de las buenas conciencias y deslindarse de quienes
no sólo los respeta(ba)n, también los admira(ba)n. ¿Es ese deslinde parte de
los principios del nuevo partido político que construyen? ¿Es parte de la
celebración de sus 100 años?
Hubiera sido más fácil hacer como ahora hacen en la Ciudad
de México, y poner un letrero a la entrada que rezara “No se admiten
encapuchados” y ya. No hubiéramos entrado nosotros, cierto, pero su lucha de
ustedes se hubiera visto vivificada con todos los colores que son el color de
la tierra en el Congreso Nacional Indígena, así como con la diversidad de
resistencias y rebeldías que, aunque no tengan locales para hacer fiestas
culturales, florecen en varios rincones de México y el mundo.
Como quiera, en nuestras limitadas posibilidades, seguiremos
apoyando su justa lucha. Y, por supuesto, les mandamos la invitación para el
Festival.
Elija la respuesta correcta:
“Viles encapuchados” (o equivalentes con los nuevos
sinónimos: “anarquistas”, “infiltrados” “provocadores”, “estudiantes”,
“jóvenes”). Esto lo dijo, lo tuiteó, lo declaró, lo firmó, lo cantó, lo
pintó, lo dibujó, lo pensó…
a).- un o una articulista, intelectual, caricaturista,
periodista, locutor de los medios conservadores de paga.
b).- una o un articulista, intelectual, caricaturista, periodista, locutor de los medios progresistas de paga.
c).- una o un artista conservador.
d).- un o una artista progresista.
e).- un general del ejército federal.
f).- un líder de la patronal.
g).- un líder sindical obrero de la vanguardia del proletariado revolucionario.
h).- un líder de un partido político alineado a la derecha.
i).- un líder de un partido político alineado más a la derecha.
j).- un líder de un partido político alineado… Ya, en resumen: un líder de un partido político cualquiera.
k).- Epi.
l).- Enrique Krauze.
m).- todos los anteriores.
b).- una o un articulista, intelectual, caricaturista, periodista, locutor de los medios progresistas de paga.
c).- una o un artista conservador.
d).- un o una artista progresista.
e).- un general del ejército federal.
f).- un líder de la patronal.
g).- un líder sindical obrero de la vanguardia del proletariado revolucionario.
h).- un líder de un partido político alineado a la derecha.
i).- un líder de un partido político alineado más a la derecha.
j).- un líder de un partido político alineado… Ya, en resumen: un líder de un partido político cualquiera.
k).- Epi.
l).- Enrique Krauze.
m).- todos los anteriores.
Resultado: Cualquier letra que haya seleccionado es
correcta. Si eligió la última opción, usted no sólo ha acertado, también ha
hecho un monitoreo exhaustivo de redes sociales y medios de paga y libres. No
sabemos si felicitarle o darle el pésame. Lo dicho: en los tiempos actuales, si
no estás bien confundido es que no estás bien informado.
En el balcón de las redes sociales:
Un tuit modelo de la gente bien después de la marcha del 20
de noviembre del 2014 en la ciudad de México:“¿por qué la policía detuvo
arbitrariamente a civiles en lugar de detener a los anarquistas?” Ojo: note
usted no sólo que a los anarquistas está bien detenerlos arbitrariamente,
también que no son “civiles”.
Un comentario de la gente bien frente a una foto de la policía
del DF en modo “legusteaquienleguste” golpeando a una familia en los
alrededores del zócalo del DF el 20 de noviembre del 2014: “Yo los conozco y
ésos no son anarquistas“. Ojo: si nadie lo conoce o es anarquista, se merece
esos golpes.
Un argumento de la gente bien al inicio del movimiento, o
después, no importa: “De seguro esosayotzinacos se lo buscaron, quién les
manda andar de anarquistas“. Ojo: sin comentarios.
El Diálogo Imposible:
“¿Cómo que no entiendes cómo está eso de encapuchados igual
a anarquistas igual a infiltrados? Mira, esa gente no quiere hacer política,
sólo quiere hacer desorden. Eso quiere decir anarquismo: desorden. Lo de
cubrirse el rostro es por cobardía. Y lo de infiltrados es porque sirven al
gobierno. ¿Qué? Sí también están encapuchados los zapatistas y estaban
encapuchados quienes se enfrentaron a Ulises Ruiz en Oaxaca, y algunos de los
que ahora se movilizan en Guerrero y Oaxaca. Ah, pero ésos no están aquí, en
nuestra ciudad (el “nuestra” ha sido remarcado con una mirada de advertencia).
Los zapatistas, los oaxaquitas y los de guerrero, bueno, pues son inditos de
buen corazón. Claro, sin dirección política clara. Y están lejos, se les puede
mandar ayuda humanitaria, que es como nosotros llamamos a deshacernos de lo que
ya no sirve o se ha vuelto inútil, o peor aún, pasado de moda. Pero estos
pinches anarquistas están aquí, toman nuestras calles (se repite la mirada
amenazante en el “nuestras”) y, ¿cómo te diré?, pues arruinan el paisaje. Un@
aquí esforzándose por hacer un buen happening muy en la onda retro, los
sixties, ¿me entiendes?, muy de amor y paz, de era acuario, flores, canciones,
drogas blandas, smartdrinks, buena vibra pues. Mira, tengo una aplicación en mi
fon que despide luces con tonalidades acordes a lo que me meto. ¿Eh? No, yo no
marcho en un contingente, yo camino por el camellón, me subo a… No, no es para
ver mejor la marcha, es para que las masas me vean mejor. Mira chavo, chava o
lo que seas, las manifestaciones aquí deben ser como ir al club, ¿me entiendes?
Se trata no de protestar sino de vernos entre nosotros, saludarnos, y al día
siguiente confirmar que somos los que somos, no en la sección de sociales, sino
en la de nacionales.
Además, esto de Ayotzi… No, ya nadie dice Ayotzinapa, es
más cool decir “Ayotzi”. Bueno, pues te decía que Ayotzi tiene repercusión
internacional o sea que nos da un aire muy cosmopolita. Qué socialités ni qué
nada, eso es para las derechas. Nosotros, las izquierdas modernas, nos damos a
conocer en estos eventos.
En la próxima, si esos nacos no se reiteran, estamos
viendo de traer a Mijares. Sí, para que nos cante ésa de “soldado del amor”. Y
para estar a tono que venga también Arjona y se aviente con ésa de “soldado
raso”.
Sí, se va a ver súper todos marchando al ritmo, tomados de la mano con
los guardias presidenciales y los policías. Tal vez mejor de noche y sacamos
los encendedores y movemos los brazos al compás de “soldado del amor, en esta
guerra entre tú y yo…” y con Arjona “voy marcando el paso, mientras sobrevivo.
No tengo coraje, me ganó el olvido”. Sí, ya estamos viendo de que, en la
próxima, Eugenio Derbez sea el orador principal. ¡Será genial! ¡Infiltraremos a
Televisa y la pondremos de nuestro lado! ¿Eh? No, ya no vamos a pedir que
renuncie Peña… Pues porque ya se pasó la fecha, ahora tenemos que prepararnos
para el 2018. ¿Eh? Qué importan las demandas originales de los de allá. Cierto,
pobrecitos, pero por eso mismo deben aceptar la dirección de los que saben, o
sea de nosotros. Mira, lo que este país necesita no es una revolución, sino un
buen “feat” masivo o sea nosotros en el papel principal y único, y la plebe en
los coros o de tramoyistas, sí, la historia que vale la pena es una “selfie”
con nosotros en primer plano y las masas atrás y abajo, embelesadas,
aclamándonos, y… sí, ya tengo las palabras que voy a decir cuando me supliquen
que suba al templete… ¡Ey! ¡Espera! ¿Por qué te niegas al diálogo? ¡Pinche
anarco! ¡Y mejor ponte una capucha porque desde lejos se te nota lo naco! ¡Ah,
por eso este país no avanza! Pero ya le tomé la foto, ahora la subo a mi feis
para que anoten a otro infiltrado, ¿o era infiltrada? Bueno, no me fijé bien, y
es que vestía muy de hueva, muy de cliché. Me dueles México…”
Otras líneas de investigación:
1.- Las tres palabras que les valieron, a Abarca estar bajo
protección en el penal del Altiplano, y el arraigo a su dama de hierro región
4, ambos fuera del alcance de los medios: “fueron los federales“. Después de
eso, ya no les preguntaron más. No porque no quisieran saber, sino porque ya
sabían.
2.- Ahora que allá arriba sí están contemplando seriamente
la posibilidad del “relevo” en Los Pinos (de ahí la súbita elocuencia de los
titulares de marina y sedena, y los caóticos deslindes del poder mediático),
quienes pedían hasta antes del 1 de diciembre la renuncia de Peña Nieto, ¿ahora
van a sacar un documento que se llame “La Defensa de las Instituciones y el
Rechazo a la Renuncia Presidencial. Versión junio de 1996, actualizada al
2014-2015″?
Señalar y delatar en serio:
1.- El análisis que adjudica la responsabilidad de la
represión a las acciones directas violentas de grupos “anarquistas”, debería
ser consecuente y, en el caso de México, también hacer responsable de la
represión a quien develó el escándalo de la llamada “casa blanca” provocando el
enojo de la pareja presidencial (aunque luego compensó asumiendo las funciones
de Ministerio Público). Pero no, el reparto de culpas también es de clase. Y corresponde
a los bien portados enarbolar la campaña de criminalización de los jóvenes
pobres (según la secuencia de equivalencias: infiltrado = encapuchado =
anarquista = joven = pobre), que es la misma que, en su tiempo, echó a andar la
larga pesadilla ahora llamada “Ayotzinapa”.
2.- Según lo último que vemos, leemos y escuchamos, los
infiltrados comprobados no se cubren el rostro. Infiltrados por el gobierno de
la Ciudad de México (“la izquierda institucional como alternativa”) y sus
empleados, han sido filmados agrediendo a manifestantes, haciendo detenciones
arbitrarias y “sembrando” capuchas en los agredidos.
Ahora bien, siguiendo el método de análisis aconsejado por
la histeria y la lógica impecable de los policías del pensamiento y el buen
vestir, es de esperar que todas las personas que no marchen encapuchadas son
potenciales “infiltrados” y deben ser señaladas, detenidas y puestas a
disposición de la autoridad “para que dejen a los encapuchados manifestarse por
sus demandas”. Así que ahora, cuando en las marchas vean a alguien no
encapuchado, deberían señalarlo y expulsarlo al son del estribillo “no a la
violencia, no a la violencia”.
3.- Un poco de memoria: ¿No son quienes ahora critican las
acciones “violentas” contra el patrimonio “histórico”, comercial y financiero
en las manifestaciones por Ayotzinapa en el DF, los mismos que bloquearon
bancos, centros comerciales, se plantaron “históricamente” en Reforma en 2006,
y hostigaron a las empleadas del uniforme naranja por ser “cómplices” del
fraude electoral del 2012? Ah sí, es que es más grave un fraude electoral que
43 indígenas desaparecidos y decenas de miles de personas en la misma
situación.
4.- El clamor de la histérica campaña ha tenido eco y
cosecha sus primeros triunfos: unos vivales son detenidos en una caseta, lejos
de la marcha, mientras recolectaban apoyo en beneficio propio; son amarrados y
exhibidos triunfalmente en la “toma de la ciudad de México” el 6 de diciembre
del 2014. Luego, por la magia de los medios, se convierten en “infiltrados” en
la marcha, y se señala que hay entre ellos al menos un policía y un militar.
Del supuesto policía, nada. El supuesto militar: tiene 17 años y “confesó” que
en un mes entraría al ejército. Nadie se molestó en recordar que todos los
jóvenes mexicanos, al cumplir 18 años, deben cumplir con el Servicio Militar
Nacional. Como quiera, la acción fue aplaudida. Se espera que la histeria como
método de análisis y guía para la acción llegará a su tope cuando haya un
linchamiento. Entonces tod@s voltearán hacia otro lado.
El temido desenlace en 6 tiempos de una renuncia (complete los nombres):
1.- Un partido en crisis terminal. Card_ renuncia al
partido: “seguiré como un ciudadano más“, declara.
2.- Ante la crisis de la política partidaria, empieza a ser
alentada la “opción ciudadana”. En la prensa y círculos progres se
empieza a hablar del surgimiento del “Card_ísmo social”.
3.- Crece el movimiento y se emplaza a todos a la unidad
incondicional en torno al “ciudadano” Card_.
4.- Lop_ se niega.
5.- Nuevo fraude electoral. Una gran concentración en el
zócalo capitalino. Entre los manifestantes se pueden apreciar algunas
cartulinas que reproducen las últimas caricaturas de los moneros progres:
“Los de Ayotzinapa son un invento de Salinas” es el común denominador. En su
turno en el templete, Ele_ menciona a Lop_. Gran abucheo y silbidos de las
masas. Al otro día Ele_ aclara que mencionó a Lop_ sin malicia y que, en lo
personal, le tiene gran aprecio.
6.- Después del plantón de rigor, Card_ anuncia que hay que
seguir en la lucha… creando un nuevo partido para contender en las próximas
elecciones. No, si gana, ya no irían Epi a comunicación social, ni el tonto del
desfiladero a vocero presidencial. ¿O sí? Gulp.
La historia que no cuenta para los happenings progresistas:
Sí, hay quien recuerda que el 6 de diciembre de este año se
cumplieron 100 de la entrada de los ejércitos villistas y zapatistas a la
Ciudad de México. Nosotros, en cambio, recordamos el zapatista gesto negativo y
de desprecio frente a la silla presidencial: “cuando alguien bueno se sienta
ahí, se hace malo; cuando es malo, se hace peor“, dicen que dijo el jefe del
Ejército Libertador del Sur. Y si no lo dijo, seguro lo pensó.
Consejos no pedidos y que, por supuesto, nadie va a seguir:
1.- Basta de buscar su Sinsajo. Dejen el tren de la
desilusión, ahí la próxima estación es “apatía y cinismo”. Su destino final:
“la derrota”.
2.- No se claven en los trending topic o como
se diga. Lo mismo en tuits de gente “famosa”, “líderes de opinión” o
gente supuestamente “inteligente”. Busquen los tuits de la gente
común. Encontrarán ahí verdaderas joyas literarias en miniatura y pensamientos
de ésos que valen la pena, es decir, los que obligan a pensar. Ahí no hay tuit pequeño.
Los trending topic (los “temas del momento”)
sólo sirven como espejo deformado y son tan ridículos como un salón de
masturbación masiva: al final terminan todos insatisfechos y batidos. Y llega
un momento en que los tuits son como diálogo de película porno: “¡oh! ¡sí,
sí, así, no pares!“. ¿O es un gran mérito ganarle al hashtag #WeLoveYourNewHairJustin
o al de #Sammy?
3.- Valorar a una persona por el número de seguidores y no
por sus pensamientos y acciones es ocioso e inútil.
Si la mierda tuviera feisbuc, tendría “likes” (y “licks“) de
cientos de miles de millones de moscas.
4.- En defensa de las redes sociales, o más bien en defensa
del uso de las redes sociales, pensamos que son también una compartición si se
elige a dónde dirigir la mirada y el oído.
Hay grandes escritoras y escritores, pensadoras y
pensadores, analistas y critíc@s, luchador@ sociales que no aparecen ni
aparecerán en los grandes medios de comunicación de paga. Y much@s de ell@s no
porque no l@s “descubran”, sino porque han elegido otro canal para expresarse.
Esto no sólo hay que saludarlo, también alimentarlo.
5.- Pero, por grandes que sean las posibilidades de las
redes sociales, también lo son sus limitaciones. Además de lo obvio, es decir,
de que no se pueden tuitear silencios y miradas, aunque es gigantesco
el universo de su quehacer, sigue siendo más grande el universo que queda
excluido.
Las redes sociales no sirven para suplantar la comunicación
básica (mirar, hablar, escuchar, tocar, oler, gustar), sino para potenciarla.
“Si no está en tuiter no existe”, remeda la caduca
sentencia “si no está en los medios no existe”.
Aunque no lo crean, hay muchos mundos afuera del espacio
cibernético. Y vale la pena asomarse a ellos.
Ahí nos estamos vimos viendo:
Sí, ya sabemos que somos incómod@s para unos y otros. Para
unos somos radicales, para otros somos reformistas.
Tod@s, arriba y abajo, tendrán que tragarse esto:
Acá abajo, cada vez somos más
quienes nos empeñamos en luchar
sin suplicar perdón por ser lo que somos
y sin pedir permiso para serlo.
quienes nos empeñamos en luchar
sin suplicar perdón por ser lo que somos
y sin pedir permiso para serlo.
Sale.
Desde las montañas del Sureste Mexicano.
Subcomandante Insurgente Moisés.
México, 12 de Diciembre del 2014. En el año 20 del inicio de
la guerra contra el olvido.
Nota: Monitoreo de medios de paga, de medios libres,
autónomos, independientes, alternativos o como se llamen, y de redes sociales,
así como el aporte desinteresado de sarcasmos, diván psicoanalítico gratuito,tips de
investigación, consejos inútiles, camisa de fuerza de 140 caracteres en algunas
partes y otros efectos especiales: contribución de “Los Tercios Compas” que,
como su nombre lo indica, no son medios, ni libres, ni autónomos, ni
alternativos pero son compas. Copyrights anulados por usar capucha.
Se puede citar, recitar y reciclar señalando la fuente como “infiltrada”. Se
autoriza la reproducción total o parcial frente a la tira con uniforme y sin
uniforme, sea que esté detrás de un arma, un escudo, una cámara, un micrófono,
un esmarfon, una tablet, o en el espacio cibernético.
Damos fe: “Winter is coming, así que no olviden sus cobijas”
(uno de los Stark en la próxima temporada de Game of Thrones. Spoil cortesía de
“Los Tercios Compas”. Nah, no hay por qué darlas).
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